10.8 C
San Luis Potosí
martes, noviembre 11, 2025

El agujero negro que nos hizo ver el pasado a cámara lenta

Un destello 30 veces más brillante que cualquier otro revela cómo el universo primitivo devoraba estrellas gigantes

Destacadas

Entre Líneas
Entre Líneashttps://entrelineas.news
Noticias claras, análisis profundo. La verdad se lee Entre Líneas. #EntreLineas

TL;DR

  • El destello brilló con la intensidad de 10 billones de soles, 30 veces más que cualquier registro anterior
  • Ocurrió hace 10 mil millones de años pero lo vemos en cámara lenta por la expansión del universo
  • La estrella devorada tenía entre 30 y 200 veces la masa del Sol, una rareza cósmica
  • El fenómeno seguirá visible durante 11 años mientras el agujero negro termina su banquete

Cuando el cosmos se puso dramático

Imagina un destello tan potente que equivale a 10 billones de soles brillando a la vez. No, no es el guión de una película de ciencia ficción barata. Es lo que Dw reporta que astrónomos detectaron en 2018: el resplandor más energético jamás registrado en la historia de la observación cósmica.

Lo que hace este descubrimiento particularmente fascinante no es solo la escala monstruosa, sino el timing cósmico. Estamos viendo algo que ocurrió hace 10 mil millones de años, cuando el universo era prácticamente un adolescente rebelde. Y aquí está el detalle que te hace decir «no mames»: lo estamos viendo en cámara lenta.

El banquete estelar más espectacular

El protagonista de esta tragedia cósmica es un agujero negro supermasivo con la masa de 300 millones de soles, según Es-us. Su víctima: una estrella entre 30 y 200 veces más masiva que nuestro Sol. Para ponerlo en perspectiva, si nuestro Sol fuera una pelota de tenis, esta estrella sería del tamaño de un coche compacto.

Lo que los científicos llaman «evento de disrupción de marea» suena bastante técnico, pero en realidad es algo bastante violento: la estrella se acercó tanto al agujero negro que la gravedad extrema la estiró como si fuera chicle, la desgarró y empezó a devorarla lentamente. Infobae detalla que el material estelar empezó a caer en espiral hacia el abismo, liberando esa cantidad colosal de energía que todavía estamos viendo.

La dilatación temporal: el truco cósmico

Aquí es donde la física se pone realmente interesante. Matthew Graham, el astrónomo líder del estudio, explicó algo que parece sacado de una novela de Philip K. Dick: «Siete años aquí son dos años allá».

Resulta que debido a la expansión del espacio-tiempo -ese fenómeno que Einstein predijo y que todavía nos cuesta trabajo digerir- estamos viendo el evento reproducirse a un cuarto de su velocidad real. Es como si el universo nos hubiera puesto un botón de pausa para que no nos perdiéramos el espectáculo.

Lo más irónico es que los astrónomos casi no se creen sus propios números cuando calcularon la energía liberada. «Al principio, realmente no creíamos los números sobre la energía», admitió Graham a Dw. Y con razón: estamos hablando de un destello que aumentó su brillo 40 veces durante las observaciones y alcanzó su punto máximo en junio de 2018.

¿Por qué esto importa más allá del récord?

Más allá del «wow factor» de tener un nuevo récord cósmico, este descubrimiento es como una máquina del tiempo que nos permite estudiar cómo funcionaban los agujeros negros supermasivos cuando el universo era joven.

Joseph Michail, del Centro Harvard-Smithsonian de Astrofísica, lo explicó perfectamente: permite «examinar la interacción de los agujeros negros supermasivos con su entorno en las primeras etapas del universo».

Lo curioso es que este fenómeno sigue activo. El destello todavía se está desvaneciendo lentamente y se espera que el banquete completo dure unos 11 años. Así que tenemos tiempo para seguir estudiando cómo un agujero negro de 300 millones de masas solares se da un atracón estelar.

Las preguntas incómodas que quedan

Si una estrella tan masiva -hasta 200 veces nuestro Sol- existía en el universo primitivo, ¿qué nos dice sobre la formación estelar en esas épocas? Las estrellas de ese tamaño son rarezas cósmicas con vidas extremadamente cortas, como rockstars que queman rápido y brillan intensamente.

También queda la pregunta de cómo llegó esa estrella a acercarse tanto al agujero negro. Los investigadores especulan que quizás colisionó con otro cuerpo masivo que la empujó hacia el abismo gravitacional. Una especie de accidente cósmico con consecuencias espectaculares.

Lo que este descubrimiento realmente nos enseña es que el universo primitivo era un lugar mucho más violento y dinámico de lo que imaginábamos. Y que todavía nos queda mucho por aprender sobre cómo estos monstruos cósmicos crecieron hasta alcanzar tamaños que desafían la imaginación.

Mientras el destello sigue desvaneciéndose lentamente en el cielo, nos queda la certeza de que estamos presenciando uno de los eventos más extraordinarios que el cosmos ha ofrecido a nuestros telescopios. Y la pregunta incómoda: ¿cuántos espectáculos cósmicos igual de impresionantes nos estamos perdiendo porque ocurrieron cuando no teníamos la tecnología para verlos?


Fuentes consultadas:

Autor

  • Entre Líneas

    Noticias claras, análisis profundo. La verdad se lee Entre Líneas. #EntreLineas

- Publicidad -spot_img

Más noticias

- Publicidad -spot_img

Últimas Noticias